
En mayor o menor medida, todos somos renuentes a acudir al médico. Se alegan cosas tan dispares como falta de tiempo o despreocupación por el “leve” síntoma (“ya se me pasará”). También hay quien no va por “miedo a lo que me puedan encontrar”, lo que genera ansiedad y nerviosismo; esta excusa es más soterrada y, aunque esté ahí, somos más proclives a esconderla, porque en el fondo nos da vergüenza reconocer ese miedo. Y no hacer caso de un síntoma que perdura es un error mayúsculo, pues cualquier dolencia diagnosticada tempranamente es mucho más susceptible de curación que si se deja pasar el tiempo. Continue reading “4 problemas que las mujeres no deben ignorar”

 
		 
		
 
		
 
		
 
		 
		