Salut i medicina, Vida Sana

El buf al cor

El soplo al corazón, o soplo cardíaco, es un ruido anormal -como un silbido- que se oye a la auscultación con el fonendoscopio, (ese dispositivo que usan los médicos para oír mejor la respiración, o el corazón). El ruido lo produce un flujo anormal, desigual y turbulento de la sangre a través de las válvulas cardiacas.

Un vistazo al corazón. Las válvulas cardíacas

El corazón es el motor de la circulación de la sangre, que es el tejido (un tejido líquido) que alimenta las células de todo el cuerpo. Consta de cuatro cavidades, las aurículas, izquierda y derecha, y los ventrículos, también izquierdo y derecho. Su función es bombear la sangre “limpia” que le llega de los pulmones a través de venas pulmonares, que desembocan en la aurícula izquierda; de la aurícula pasan al ventrículo del mismo lado. Una válvula, la válvula mitral, regula el paso de la sangre de la aurícula al ventrículo, impidiendo que pueda regresar a aquella. La sangre limpia (cargada de oxígeno para nutrir las células) sale del ventrículo por la aorta (la arteria más gruesa del cuerpo) por la que se distribuye a todo el cuerpo. De nuevo, una válvula, la válvula aórtica, impide que la sangre vuelva al corazón.

La sangre “sucia” (cargada de CO2, o dióxido de carbono), que es el residuo de las células tras tomar el oxígeno procedente de las células de todo el cuerpo, desemboca en la aurícula derecha a través de la vena cava; de la aurícula pasa al ventrículo derecho, atravesando una válvula que impide el retorno: es la válvula tricúspide. Finalmente, del ventrículo sale la arteria pulmonar, que devuelve la sangre “sucia” a los pulmones, donde se libera el CO2 y la sangre se recarga de oxígeno. Una válvula, la válvula pulmonar, impide el retorno de la sangre al ventrículo izquierdo. Puedes ver un esquema de la circulación sanguínea aquí.

El corazón tiene, como hemos visto, cuatro válvulas. El funcionamiento anómalo de cualquiera de ellas es lo que puede producir el flujo turbulento de la sangre, produciendo un sonido que es lo que llamamos “soplo”. Puede darse cualquiera de las dos siguientes circunstancias:

  • Cando una válvula no se cierra adecuadamente y se produce el retorno
  • Cuando una válvula se estrecha o se rigidiza (estenosis)

La mayoría de los soplos son inofensivos o inocuos, y pueden ser congénitos (o sea que el paciente nace con él) o adquiridos. Cuando es leve, no revela enfermedad del corazón y no necesita tratamiento. Pero los soplos también pueden ser síntomas de enfermedad cardíaca grave, o del sistema circulatorio, como veremos.

Síntomas del soplo

Los soplos inocuos no suelen provocar síntomas. Los más graves pueden producir los siguientes:

  • Dolor en el pecho
  • Tos persistente
  • Mareos
  • Desmayos
  • Uñas y labios azulados
  • Venas del cuello hinchadas
  • Falta de aire
  • Inflamación en el hígado
  • Sudor intenso aún con poca actividad
  • Hinchazón o aumento repentino de peso
  • En los bebés, falta de apetito y ganancia pobre de peso.

Clases de soplos

Se clasifican según el sonido que se oye con el fonendoscopio en una escala que va del 1 al 6. También se tiene en cuenta el momento del latido en el que se produce, o sea sistólico -durante la sístole, que es cuando el corazón bombea hacia afuera la sangre “limpia”- o diastólico: la diástole es la fase del latido en que la sangre “sucia” llega al corazón.

Como se dijo, los soplos inocuos, de grado 1, no necesitan tratamiento. Los soplos más serios pueden indicar problemas cardíacos:

  • Problemas en las válvulas mitral o aórtica (regurgitación, estenosis)
  • Problemas en la válvula pulmonar, que puede ser incapaz de cerrarse del todo, o bien presentar estenosis
  • Problemas con la válvula tricúspide

Los soplos en los niños son ocasionados generalmente por:

  • Malformación de las válvulas pulmonares
  • Comunicación interauricular: Formación defectuosa de la pared que separa las dos aurículas. Es un problema congénito
  • Comunicación interventricular: mismo problema, trasladado a los ventrículos
  • Estrechamiento de la aorta: “coartación aórtica”.

Tratamiento del soplo cardíaco

El tratamiento dependerá de la causa. El médico será quien determine el tratamiento adecuado a cada paciente. Podrían ser farmacológicos (mediante medicamentos) o quirúrgicos (con cirugía).

Medicamentos habituales:

Procedimientos quirúrgicos

La cirugía puede ser necesaria para reparar (o reemplazar) una válvula defectuosa. Puede hacerse:

  • A corazón abierto
  • Mediante un robot
  • Cirugía mínimamente invasiva, realizada por laparoscopia (o sea mediante tubos que el cirujano controla con un monitor, dirigiéndolos adecuadamente.

Los problemas más habituales tratados mediante cirugía son:

  • Cerrar orificios en la válvula
  • Separar las partes que se han fusionado de una válvula
  • Resección de un exceso de tejido para que la válvula pueda volver a cerrar adecuadamente
  • Reforzar el anillo que rodea la válvula
  • Reemplazar los soportes (cordones) de la válvula

Bibliografía:

Fundación Española del Corazón
Texas Heart Institute