Otros

Por qué las plantas en la oficina son beneficiosas: 5 razones

planta oficina

Las plantas embellecen cualquier espacio interior. Además del efecto estético que añaden, aportan una sensación de frescura y de aire libre que resulta relajante. Hasta aquí lo puramente psicológico de las plantas en los interiores. Pero es que hay algo más y es que hay ya bastantes estudios que muestran que ponerlas en tu mesa de trabajo tiene consecuencias benéficas para tu salud.

A continuación, Elena Puyal, Paisajista consultora en Jardinería y Plantas de Interior, te cuenta lo que la ciencia dice.

1. Purifican el aire

Las cortinas o los estores, los muebles, las moquetas y alfombras, los diversos materiales de construcción, por no hablar de los productos de limpieza, influyen en la calidad de aire, e influyen para mal. Está comprobado que todos esos factores pueden generar desde dolores de cabeza hasta problemas respiratorios, desde mareos hasta cansancio.

Cintes© Pick Ontario

La NASA hizo un estudio del aire en el interior del SkyLab e identificó nada menos que 107 componentes perniciosos para la salud. Y ciertas plantas de interior que, por el simple hecho de purificar el ambiente, los eliminaban.

2. Disminuyen el estrés

No resulta extraño a nadie que trabaje en una oficina que quien más quien menos, todos estamos sometidos a cierta presión. Pues resulta que una planta para la mesa de despacho puede ser mucho más efectivo que esos dispositivos, como esas pequeñas pelotas que se aprietan y aflojan y que se supone que alivian el estrés.

Dracaena
Dracena ©Ambius

La Washington State University efectuó un estudio comparativo en el que los participantes debían efectuar sus tareas con plantas y sin plantas a su alrededor. Los resultados concluyeron que eran más productivos, estaban menos estresados y tenían una presión arterial más baja cuando tenían cerca las plantas. Pues ya sabes, ¡nadie va a poner pegas por que tengas una pequeña planta en tu mesa!

3. Frenan las enfermedades

Las plantas pueden ayudarte si eres proclive a pillar todos los microbios y gérmenes que hay a tu alrededor. Una investigación llevada a cabo en Noruega muestra que la prevalencia de enfermedades en las oficinas en que hay plantas cae más de un 60% en comparación con las que no tenían nada de verde.

4. Serás más productivo

Esa maceta encima de tu mesa te relajará en alguna medida, sin duda. Pero es que además vas a rendir más. Según un estudio de la Universidad de Exeter, hasta un 15% más.

kentia
Kèntia ©Vimeplant

La razón que encontró el estudio es que en tu trabajo te vas a comprometer más con la empresa porque te vas a sentir más integrado y más involucrado en el trabajo, en los planos físicos, cognitivos y emocionales.

5. Vas a estar más cómodo

Uno de los problemas de las oficinas modernas está en la calefacción, o en el aire acondicionado. Idealmente, el aire en las oficinas debería estar a una temperatura y tener un grado de humedad ambiente determinados. Pero lo cierto es que esto no suele ser así, y hace demasiado calor o bien demasiado frío, según sea verano o invierno. El aire acondicionado, en general, seca el ambiente y si la humedad ambiente cae, la actividad puede verse ralentizada.

Poto
Potos ©Pick Ontario

Fue también la Washington State University la que investigó si las plantas podían servir de ayuda aquí. Y concluyó que las plantas de interior incrementan la humedad ambiental, aumentando el confort de los empleados.

¿Cuáles son las más idóneas?

Por desgracia no todas las plantas pueden sobrevivir en una oficina y por ejemplo, la falta de luz natural acabaría con no pocas de ellas (aunque si tienes cerca de tu mesa una ventana podrías probar con alguna palmera o unas margaritas). Pero los filodendros, por ejemplo, no necesitan tanta luz, con lo que son perfectamente aptos para ambientes más mortecinos.

spatifilum
Espatifil·li ©InJoy Organics

De nuevo, Elena Puyal nos cuenta. “Lo más inteligente es que consultes con el florista de la esquina tu caso particular, contándole qué plantas te gustan. Él sabrá decirte si son aptas a tu entorno, además de que te dirá las pautas de cuidados a que debes someterlas. Como punto de partida, recomiendo las cinco siguientes que, en mi experiencia, se adaptan perfectamente a los interiores:

  • Spatifilum (Spathiphyllum wallisii)
  • Cintas (o lazos de amor, Chlorophytum comosum)
  • Kentias (Howea forsteriana)
  • Pothos (Epipremnun aureum)
  • Troncos del Brasil, como la Dracena messangeana