Cómo mantener la mente y el cuerpo activos sin salir de casa

El aislamiento prolongado, sobre todo si se vive en soledad, puede tener consecuencias físicas y psíquicas. Mantener el cuerpo y la mente activos durante estos días es un recurso imprescindible para evitar el malestar del confinamiento. Toma nota de algunas pautas.  

Aunque los primeros días de confinamiento pudieron resultar hasta divertidos, cuando el aislamiento se alarga, tal y como está sucediendo, nuestro bienestar y nuestro organismo pueden verse afectados. Ansiedad, estrés, tristeza, depresión, falta de energía, irritabilidad, dolores de cabeza y musculares, ganancia de peso e insomnio son algunas de las situaciones que podemos estar experimentando a medida que pasan los días, estemos solos o acompañados. Una de las medidas fundamentales para pasar esta cuarentena de la mejor forma posible es mantener la mente y el cuerpo activos. ¿Cómo lo conseguimos? Debemos tener en cuenta algunas pautas.  

Planear rutinas diarias 

Tanto si se está teletrabajando como si no, y tanto si se está pasando el confinamiento solo como en familia, el organismo y la mente funcionan mejor siguiendo rutinas, que debemos intentar que sean lo más similares posibles a una situación de normalidad.

Levantarse y acostarse más o menos a la misma hora cada día, llevar un horario de trabajo normal, con momentos de descanso, hacer las comidas usuales con los alimentos a los que estamos acostumbrados o mantener los hábitos de higiene van a hacer que el día sea más llevadero y van a evitar la desorientación de tiempo y espacio y las alteraciones del sueño que se pueden producir, sobre todo en las personas mayores o las que están solas. 

Llevar una alimentación saludable

Una nutrición adecuada es esencial para poder reducir los efectos de cualquier patógeno y para que el sistema inmune funcione correctamente, muy necesario en estos días de pandemia. 

Aunque la ansiedad, y en muchos casos el aburrimiento, nos haga hacer constantes viajes a la cocina y a la nevera para picotear cualquier cosa que tengamos a mano, debemos tener que presente que el gasto calórico que hacemos estos días en casa es inferior al habitual, por lo que si nos dejamos llevar es más que probable que suframos un aumento de peso que a la larga puede influir en otros problemas de salud. 

Según los expertos en nutrición, aunque debido al confinamiento tengamos que recurrir más a productos de larga duración, como los congelados, el consejo es intentar prescindir de los alimentos precocinados y optar por productos frescos que aguantan mejor, como naranjas, mandarinas, plátanos y manzanas, así como coliflor, repollo, guisantes y judías. También es importante que la manera de cocinar sea saludable y no olvidar mantenerse correctamente hidratados para mejorar el estado de las mucosas y que el sistema inmune funcione mejor. 

Hacer ejercicio

De un día para otro se ha reducido drásticamente nuestro nivel de actividad física, por lo debemos intentar, dentro de las posibilidades de cada uno, estar lo más activos posible. En el caso del teletrabajo, el cambio de escenario y el hecho de no disponer del mobiliario adecuado puede repercutir en el estado de la espalda, el cuello y las articulaciones, por lo que hacer estiramientos y descansos es fundamental.

Otra de las consecuencias de no mantenerse activo durante estos días de confinamiento es que podemos perder capacidad aeróbica y masa muscular, lo que unido al aumento de peso, puede agravar diversas patologías, como las cardiovasculares y la diabetes, y generar nuevos problemas de salud. 

Trabajemos en casa o no, lo cierto es que la actividad física, además de mantener el cuerpo activo, libera endorfinas que nos ayudan a sentirnos mejor, muy importante en esta situación en la que la salud mental también puede verse afectada. Por tanto todos, desde los niños hasta las personas mayores, debemos intentar realizar actividad física adaptada a nuestra condición y a las posibilidades del hogar: pasear por la casa, jugar, bailar, hacer yoga, hacer tareas de limpieza… o recurrir a muchos de los vídeos disponibles en internet con rutinas de ejercicio, aunque hay que tener cuidado de escoger las que se adaptan a nuestra condición para no lesionarnos.

Realizar actividades de ocio

Siempre hemos querido disponer de tiempo para dedicarlo a nosotros y ahora es el momento. Mantener la mente activa es fundamental en estos días y para ello nada mejor que echarle imaginación: cocinar nuevas recetas, leer, escuchar música, probar nuevos juegos, el bricolaje, hacer puzzles, hacer crucigramas, hacer origamis, dibujar, coser, bailar, organizar los armarios, hacer algún curso que teníamos pendiente… Hay infinidad de posibilidades y las redes sociales nos proporcionan multitud de ideas en este sentido. 

Preservar el contacto social de manera virtual

Las personas con pocas conexiones sociales presentan alteraciones en los patrones de sueño, el sistema inmunitario, más inflamación y niveles más altos de cortisol, la hormona del estrés. También son más propensas a experimentar sensaciones de tristeza, soledad y ansiedad. Durante estos días, el contacto social con familiares y amigos es imprescindible, sobre todo para las personas mayores o para las que están pasando solas la cuarentena. Por suerte, además del teléfono hoy día disponemos de herramientas como los chats y las videoconferencias que nos permiten mantener un contacto social activo.

Aprovechemos el confinamiento para reforzar lazos y reir. La risa nos permite liberar endorfinas, que mejoran el estado de ánimo; dopamina, que aumenta las sensaciones de placer y bienestar; adrenalina, que ayuda al cuerpo a enfrentarse a situaciones estresantes, y serotonina, que ayuda a relajarnos y a dormir. Y por si fuera poco, refuerza el sistema inmune.

Evitar la sobreinformación

Es normal sentir preocupación y miedo a la enfermedad, tanto si nos afecta a nosotros como a nuestros seres queridos. Los medios de comunicación no hablan de otra cosa y en nuestras redes sociales se comparten de forma contínua informaciones, consejos y otros datos sobre el coronavirus. Para mantener una buena salud mental, los psicólogos recomiendan evitar la sobreinformación en este sentido. Informarse adecuadamente es necesario para seguir las recomendaciones sanitarias, pero evitemos la infoxicación o la posibilidad de difundir bulos que aumentan el temor y alejan la tranquilidad.

En resumen, para sobrellevar el confinamiento de la forma más saludable posible, es importante mantener la mente y el cuerpo activos. Pensemos que el confinamiento es una medida positiva que nos va a ayudar a salvar vidas, pero no debemos descuidar nuestra salud física y mental con hábitos inadecuados.