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La importancia de la revisión ginecológica

Es muy importante para toda mujer hacer un control ginecológico anual. La Dra. Natàlia García Montaner, especialista en ginecología del Centro Médico MGC, nos explica la importancia que tienen las revisiones ginecológicas a la hora de detectar de forma precoz cualquier anomalía en el sistema reproductor femenino.

¿Cuándo es necesario empezar a realizarse controles ginecológicos?

Si no hay ningún problema cuando vienen las primeras reglas, se tienen de forma normal y no son especialmente ni abundantes ni dolorosas, aunque puedan ser muy irregulares al principio, la recomendación es empezar con las visitas ginecológicas cuando se comienzan a tener relaciones sexuales o a una edad media en torno a los 25 años.

¿Por qué son necesarios?

Desde el punto de vista ginecológico hay muchos órganos que son fáciles de controlar. Por eso es muy importante que la mujer se realice revisiones periódicas para detectar de forma precoz cualquier anomalía, como por ejemplo el cáncer de mama o lesiones premalignas del cuello de la matriz que puedan derivar en un cáncer de cuello de útero. Y es muy importante hacer esta visita con una periodicidad, por ejemplo anual, porque la detección precoz aumenta las posibilidades de curación.

¿Qué problemas se pueden detectar con este tipo de revisiones?

Es muy  importante detectar de forma precoz las lesiones que con el tiempo pueden evolucionar en un cáncer de cuello de útero. Para ello se realiza una citología cervicovaginal, una exploración muy sencilla que no provoca muchas molestias.

Por otro lado también se pueden detectar posibles casos de cáncer de mama. La probabilidad aumenta a partir de los 40-45 años, por lo que es muy importante que a partir de esta edad las mujeres se realicen una mamografía una vez al año. Y es que esta prueba puede revelar de forma precoz lesiones que aún no son palpables en una exploración propia de la mujer o en una exploración ginecológica o lesiones que aún no presentan síntomas, como un bulto o una anomalía en el pecho. Y hoy en día, con la gran evolución de los tratamientos del cáncer de mama, si se detecta de forma precoz, en su etapa inicial, las probabilidades de curación son prácticamente del 100%.

¿Qué pruebas se realizan en las revisiones ginecológicas?

Básicamente, a partir del segundo o tercer año desde el inicio de las relaciones sexuales se realiza una citología, una prueba que analiza las células del cuello uterino para detectar infecciones vaginales o lesiones que puedan ser premalignas. También se puede hacer una ecografía transvaginal para examinar la vagina, la forma del útero, los ovarios, las trompas de falopio, la vejiga y poder diagnosticar problemas como quistes ováricos o miomas que hayan podido pasar desapercibidos en la exploración. Y a partir de los 40-45 años, se realiza una mamografía o ecografía mamaria.

¿Cuáles son los síntomas por los cuáles se debería consultar a un ginecólogo?

Durante la etapa fértil, mientras se tienen reglas periódicas, si la mujer aprecia cualquier irregularidad menstrual, aunque le parezca banal, es conveniente que realice una consulta médica. También tras la menopausia, si se produce algún tipo de sangrado después de un periodo de un año sin reglas.

Y en general, cualquier cambio en el color, en el aspecto o en la cantidad de secreción vaginal, mal olor o molestias, puede estar manifestando que hay un cambio en la flora vaginal que puede esconder algún tipo de infección, por lo que también debe consultarse con el ginecólogo.