Ejercicio, Vida Sana
Deportes acuáticos: diversión y salud para el verano
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Las altas temperaturas, las vacaciones y el cambio de rutina hacen que la práctica de ejercicio disminuya en verano. Durante estos meses, los deportes acuáticos son una magnífica opción para relajarnos y divertirnos mientras ganamos potencia muscular y cardiorrespiratoria, quemamos calorías y cuidamos las articulaciones. Toma nota de todos los beneficios que tiene el ejercicio en el agua.
Salir a andar o a correr a pleno sol y con un calor sofocante no apetece mucho ni es recomendable. Y aunque en el gimnasio se suele estar fresco, durante las vacaciones o en nuestro periodo de descanso solemos desplazarnos de nuestro lugar de residencia, por lo que no tenemos tan a mano realizar nuestras rutinas habituales de ejercicio. Tanto si eres de los que realizan deporte durante todo el año como si lo haces de forma más esporádica, seguro que un buen chapuzón siempre apetece. La playa y la piscina ofrecen muchas posibilidades para realizar actividades que, además de refrescarnos, divertirnos y mejorar nuestro estado de ánimo, nos aportan beneficios muy saludables.
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Beneficios de los deportes acuáticos
Se hace más ejercicio con menos esfuerzo. La resistencia que ejerce el agua es doce veces mayor que la del aire, lo que hace que los movimientos sean más lentos. Esta misma resistencia y ralentización hace que los músculos y las articulaciones no se sobrecarguen. Si además añadimos accesorios como aletas o tablas, la resistencia, y por tanto el ejercicio, es aún mayor.
Se queman más calorías. La resistencia del agua hace que los ejercicios acuáticos quemen entre 10 o 12 calorías por minuto y contribuye a tener un vientre más plano.
Mejoran la circulación sanguínea. Tanto los cambios de temperatura entre el agua y el ambiente exterior, como el tipo de ejercicio que escojamos, activan y favorecen la circulación.
El ejercicio en el agua es apto para todas las personas y todas las edades. Los ejercicios son suaves y requieren menor intensidad que otros, por lo que pueden practicarlos tanto niños como mayores. Son especialmente beneficiosos para la tercera edad e incluso para personas con problemas de movilidad o personas que se están recuperando de lesiones musculares o articulares. También son aptos para embarazadas porque son seguros, tonifican y no cansan tanto.
Se potencia toda la musculatura. En el agua se pueden combinar ejercicios aeróbicos, de resistencia y que mejoran la capacidad cardiovascular, y anaeróbicos, de fuerza y que tonifican los músculos. De este modo se mejora la postura corporal, aumenta la resistencia física y se estiliza la figura.
Reduce el estrés. Cualquier tipo de ejercicio moderado libera endorfinas que reducen la ansiedad y el estrés y mejoran nuestro estado de ánimo. Si además los practicamos en la naturaleza y en el medio acuático la sensación de calma y bienestar es más intensa.
Es divertido. Los ejercicios son divertidos tanto si los hacemos solos como en compañía. Si nos unimos a un grupo de aquagym o aquafitness tendremos un monitor que nos animará y realizaremos los ejercicios con música.
¿Qué deportes acuáticos podemos realizar?
Hay muchas posibilidades para realizar ejercicios en el agua. Desde el más común y completo, la natación, hasta los que se realizan en la piscina, en grupo y con música, como el aquagym, el hidrospinning o el aquazumba.
En el mar tenemos muchas posibilidades, como el surf, el paddle surf, la vela, el kayak, el snorkel y el divertido flyboard.
En general, todos los deportes acuáticos nos permiten relajarnos, pero a su vez algunos facilitan que soltemos adrenalina, con lo que los beneficios para la salud mental también son muchos.
Precauciones que debemos tener en cuenta
Para evitar accidentes y lesiones al realizar deportes acuáticos siempre debemos realizar ejercicios adecuados a nuestra edad y a nuestro estado físico. Siempre es recomendable consultar con un médico para determinar qué ejercicio es adecuado en cada caso. Además, debemos utilizar la equipación adecuada, prestar atención a las condiciones climatológicas y al estado del mar, evitar ir solos por si necesitamos asistencia y tener mucho cuidado con las zambullidas, ya que tirarse de cabeza en zonas poco profundas es la primera causa de tetraplejia en España, por encima incluso de los accidentes de tráfico.