Salud y medicina

Me duele la garganta

El dolor de garganta no es una enfermedad en sí mismo, sino que es un síntoma de alerta que nos está avisando de que hay algo que no está funcionando bien en la faringe. Hoy hablamos con el Dr. Ricard Bargués Cardelús, Especialista en Otorrinolaringología del Centro Médico MGC, sobre las causas y el tratamiento del dolor de garganta.

¿Por qué nos duele la garganta?

Primero de todo, hay que decir que el dolor en sí no es una enfermedad sino que es un síntoma. Es decir, es un síntoma de alerta que nos indica que hay algo que no está funcionando bien en la zona de la que estamos hablando, en este caso la faringe. Hay que tener en cuenta que la faringe es una estructura que está al fondo de la boca, detrás de la nariz. Es un tubo que está abierto por delante y que tiene una función doble:

  • Una función respiratoria: Pasa el aire que viene de la nariz y que va hacia los pulmones.
  • Una función de paso de los alimentos que vienen de la boca y van hacia el estómago. Y por tanto, es una zona muy sensible que ha de ser capaz de digerirlos.

Cuando duele es que hay alguna patología o algún proceso que irrita, inflama o daña esta zona, por lo que debemos conocer cuál es el origen del dolor.

¿Qué factores pueden causar dolor de garganta?

Hay diferentes tipos de factores: pueden ser procesos inflamatorios, infecciosos, heridas que puedan causarse en esta zona o tumores. También puede haber lo que llamamos dolores extrínsecos, que son los que aparecen en los alrededores de la zona y que cuando tragamos los notamos como dolores propios de la garganta.Y cada uno de estos factores tienen unas patologías o unas causas que generan este dolor.

¿De qué enfermedades puede ser síntoma el dolor de garganta?

Pueden exisitr desde pequeñas molestias como por ejemplo un picor, que provocan tos, hasta dolores muy intensos que pueden incluso no dejar que podamos tragar.

Como procesos inflamatorios podríamos hablar, por ejemplo:

  • De la sequedad faríngea de la persona que respira habitualmente por la boca.
  • Procesos irritativos como el reflujo gastroesofágico, que serían las subidas de ácido del estómago y que, como es ácido clorhídrico, queman el cuello, que no está preparado para soportarlo.
  • El tabaco, por ejemplo, es posiblemente una de las principales causas, ya que es un elemento irritante que al pasar continuamente provoca que se inflame.

Como procesos infecciosos, los más típicos serían:

  • Las amigdalitis, que habitualmente se acompañan de fiebre, con placas pultáceas (blanquecinas) al fondo de la faringe y que en un grado más severo puede convertirse en un absceso periamigdalinos (una bolsa de pus detrás de las amígdalas).Es un proceso más grave que requiere tratamientos más agresivos.
  • Otra patología que lo puede provocar, de una cierta importancia, sería la epiglotitis, que es un poco más abajo, en la entrada de la laringe y que si se inflama puede provocar incluso una sensación de asfixia y ahogo.

Por lo que respecta a las heridas, lo más habitual es que se deban a la presencia de cuerpos extraños en la faringe, que suelen ser accidentales. Por ejemplo, la típica situación en que se nos clava una espina al comer pescado, o simplemente algo que nos rasca y nos deja una herida que a los largo de los días nos molesta.

Otro tipo serían las quemaduras, ya que al ingerir alimentos o vapores muy calientes podemos provocar quemaduras en la faringe, lo que hará que en unos días sintamos ese dolor en el momento de tragar.

Otra causa es lo que hemos mencionado antes: los dolores extrínsecos. Son dolores que se pueden producir en la estructura muscular alrededor de la faringe que sujeta la cabeza, ya sea por una inflamación de algún cartílago articular de la laringe, o de las vértebras, que hacen que duela al tragar e identifiquemos como dolor de garganta.

Y ya, como enfermedades más graves, serían los tumores, que se pueden originar sobre todo en personas fumadoras y bebedoras. Estos tumores pueden provocar un dolor al tragar que vaya aumentando a lo largo del tiempo o, en los casos más graves, una dificultad para tragar o incluso un bloqueo completo de la deglución.

¿Cómo podemos tratar el dolor de garganta?

Depende de si es un dolor progresivo o es un dolor agudo. En principio, si es un dolor agudo empezaremos con analgésicos, con calmantes como paracetamol o ibuprofeno. Pero ésto sería para calmar el dolor en el momento. Lo importante es que si es un dolor que persiste ya unos cuantos días, hay que valorar que lo vea el médico de cabecera o que lo vea el otorrino para establecer la causa. Que lo vea el especialista que corresponda y ya pondrá el tratamiento para intentar resolverlo.