Salud y medicina

Fagofobia: miedo a tragar

La fagofobia, también conocida como disfagia psicógena o nerviosa, es un trastorno de ansiedad que se caracteriza por un miedo excesivo y persistente a tragar alimentos sólidos o líquidos. Si bien no existen datos oficiales acerca del número de pacientes que lo padecen, se cree que afecta a una de cada 500 personas, aunque el número de casos se ha incrementado en los últimos años. Por este motivo, en este artículo te contamos en qué consiste, sus causas y sintomatología, así como el tratamiento adecuado. 

Qué es y cuales son sus síntomas

Qué es exactamente el miedo a tragar

La fagofobia es un trastorno psicológico que provoca un miedo irracional a tragar, puesto que se considera que puede producir el ahogo y poner en riesgo la vida de la persona. La consecuencia directa de esta fobia es que la persona no es capaz de alimentarse correctamente y puede acabar desnutrida y con graves problemas de salud. 

Este desorden psicológico está incluido dentro de los trastornos de la ansiedad y el simple hecho de tragar saliva, es capaz de producir un elevado nerviosismo y angustia. El pánico que sienten las personas que padecen esta fobia es tal que tienden a aislarse socialmente. De este modo, se incrementa también el riesgo de caer en una depresión. 

Aunque puede afectar tanto a hombres como a mujeres, estas últimas son más propensas, dado que son quienes padecen más ansiedad. En cuanto a la edad, no hay límites, ya que se han registrado casos de pacientes de seis años en adelante. Lo que estos suelen tener en común es un perfil controlador, perfeccionista y fácilmente sugestionable.

Síntomas de la fagofobia

Los síntomas de esta patología pueden variar en intensidad y duración, e incluyen tanto los físicos como los psíquicos. Dentro de los primeros figuran los dolores de cabeza, el aumento de la tensión muscular y la presión cardíaca, vértigos y mareos, vómitos y náuseas, ahogo y falta de aire y desmayos. 

Los síntomas cognitivos y conductuales se basan en pensamientos e ideas relacionados con tragar, que se ven acompañados de conductas de evasión, que se traducen en evitar comer y beber y en alejarse de aquellas situaciones que puedan implicar estos actos. Por ejemplo, reuniones sociales que supongan comer en público. 

No obstante, al ser el acto en sí lo que genera la ansiedad, la ingesta en privado también se ve afectada, pero lo habitual es que no afecte a la totalidad de los alimentos, sino únicamente a algunos. Si bien el miedo a tragar puede ser muy debilitante, es importante tener en cuenta que es un trastorno tratable.

Causas

Las causas exactas de esta patología son desconocidas, pero se cree que pueden ser el resultado de una combinación de factores genéticos, ambientales y psicológicos. Algunas posibles causas incluyen:

Trauma o experiencia traumática

Algunas personas pueden desarrollar fagofobia después de haber experimentado un episodio traumático relacionado con tragar, como atragantarse con un alimento o tener una experiencia cercana a la asfixia.

Ansiedad

Puede ser una forma de ansiedad alimentaria, lo que significa que las personas que la padecen tienen miedo a los efectos que los alimentos pueden tener en su cuerpo, como la indigestión, la asfixia o la asfixia por vómito.

Problemas físicos

También hay casos de personas que desarrollan la fagofobia como resultado de problemas físicos, como una lesión en la garganta, un trastorno neurológico o una obstrucción.

¿Cuál es el tratamiento?

La fagofobia puede tratarse con una combinación de terapia cognitivo-conductual (TCC) y medicación. La TCC es un tipo de terapia que se enfoca en cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento que contribuyen a la fobia. La medicación puede ser útil para tratar la ansiedad y otros síntomas relacionados con la fobia. Durante la terapia cognitivo-conductual, el o la terapeuta trabaja con su paciente para identificar y cambiar los pensamientos negativos que alimentan el miedo a tragar. 

La medicación también puede ser útil para tratar los síntomas del miedo a tragar. Los antidepresivos, los ansiolíticos y los betabloqueantes son algunos de los medicamentos que pueden recetarse para tratar la ansiedad y otros síntomas relacionados con la fobia. Es importante tener en cuenta que la medicación sólo debe ser tomada bajo la supervisión de un médico o psiquiatra y siguiendo las instrucciones de dosificación cuidadosamente.

Además de la TCC y la medicación, hay otras medidas que se pueden llevar a cabo para ayudar a superar este miedo. Algunas estrategias efectivas incluyen:

  • Practicar técnicas de relajación. La meditación, la respiración profunda y otros ejercicios de relajación pueden ayudar a reducir la ansiedad y la tensión muscular.
  • Exponerse gradualmente a los alimentos que causan ansiedad. Se puede trabajar con el terapeuta para crear un plan de exposición gradual que ayude a desensibilizarse a los alimentos que causan miedo. Se comienza con los que causan menos ansiedad y se avanza progresivamente hacia aquellos que son más desafiantes.
  • Buscar apoyo. Hablar con amistades y la familia sobre los miedos puede ser útil, ya que permite obtener el apoyo emocional necesario para superar la fagofobia. También existen grupos de apoyo para personas que sufren de trastornos alimentarios.

Cualquier persona es susceptible de padecer un trastorno de ansiedad, que puede manifestarse de diferentes formas. Si te preocupa tu bienestar y el de tu familia, apuesta por los seguros de salud y ten un apoyo siempre que lo necesites ante los imprevistos. 

Preguntas frecuentes 

¿Cómo se diagnostica la fagofobia?

Un médico o psicólogo pueden diagnosticar el miedo a tragar realizando una entrevista clínica y evaluando los síntomas y comportamientos del paciente. Pueden utilizarse cuestionarios y escalas de evaluación para ayudar a determinar la severidad de la fobia.

¿Es común?

Aunque no se sabe con exactitud cuántas personas sufren este miedo, se considera una fobia poco común. Sin embargo, es importante buscar ayuda si se presentan síntomas, ya que puede afectar la calidad de vida y la salud en general.

¿Cuánto tiempo lleva superar este miedo a tragar?

El tiempo necesario para superar la fagofobia varía según la persona y la severidad de la fobia. Con la terapia adecuada y el compromiso del paciente, es posible experimentar mejoras significativas en un periodo de semanas o meses.

¿Afecta a los niños?

Afecta tanto a niños como a adultos. Los niños pueden desarrollar miedo a atragantarse después de una experiencia traumática o como resultado de ansiedades generales. Es importante abordar el problema lo antes posible para evitar que se convierta en un problema a largo plazo.

¿Qué hago si creo que sufro fagofobia?

Si sospechas que tienes miedo o pavor a tragar, lo mejor es hablar con un médico o un profesional de la salud mental. Ellos podrán evaluar tus síntomas y determinar si padeces de fagofobia o de otro trastorno relacionado. A partir de ahí, podrán recomendarte el tratamiento adecuado.