Salud y medicina

Lesión del menisco de la rodilla: ¡Doctor tengo el menisco roto, me tiene que operar!

El Dr. Juan Miguel Rodríguez Roiz, médico traumatologo con doctorado en medicina por la Universitat de Barcelona, con actividad privada en Clinica Sagrada Familia de Barcelona, nos habla de la lesión de menisco y su tratamiento.

La rotura meniscal tiene una frecuencia elevada, se estima una incidencia de 24 por cada 100.000 personas al año. Presentan una distribución bimodal, siendo los casos más frecuentes en población joven y deportista, y presentan un segundo pico de incidencia en pacientes de mediana edad con patología degenerativa asociada. Sólo en Estados Unidos se realizan aproximadamente un millón de artroscopias por lesión meniscal en un año.

Qué es el menisco?

El menisco es una estructura que funciona como un “cojín”, hace de amortiguador de la rodilla y además ejerce función como estabilizador de la misma, por lo que tiene una gran importancia para el correcto funcionamiento de la articulación. Tanto es así que está demostrado que en los casos en los cuales el menisco no funciona correctamente, ya sea porque ha sido retirado completamente en una cirugía, o porque tiene una lesión importante, con el paso de los años la rodilla tiende al desgaste (artrosis), lo cual provoca dolor, derrames de rodilla, cojera e incluso marcada dificultad para actividades tan simples de la vida diaria como caminar unos metros, que estos casos en ocasiones requieren una prótesis total de rodilla.

Tratamiento de la lesión de menisco

Hay básicamente 3 formas de tratar una lesión meniscal. La primera y la mas habitual es el tratamiento rehabilitador/infiltraciones, una lesión de menisco NO es igual a cirugía y eso hay que destacarlo. Muchas lesiones meniscales consiguen cicatrizar, y con un tratamiento rehabilitador correctamente orientado la rodilla consigue una estabilidad muscular correcta que disminuye el dolor de rodilla. Se debe destacar que el menisco NO tiene fibras sensitivas y que no duele “per-se”, que el dolor de rodilla secundario al mismo se produce por la inflamación y líquido derivado de dicha lesión, que es la causa del dolor.

Las otras dos formas de tratamiento son quirúrgicas, a día de hoy prácticamente en todo el mundo se realiza mediante artroscopia (heridas quirúrgicas pequeñas), se puede retirar la parte dañada del menisco, lo cual se conoce como meniscectomía parcial, dejando por supuesto todo el resto de menisco sano en su sitio, y la segunda forma que es la ideal, es la sutura meniscal, es decir poner unos puntos de sutura internos que fijen el menisco y permitan que pueda cicatrizar.

Sutura meniscal

La sutura meniscal suena como el tratamiento ideal, pero es cierto, ya que NO todas las lesiones meniscales son susceptibles de reparar, debido a que puede que se produzcan en una zona del menisco que tiene menos sangre y esa zona no es posible repararla en muchos casos. Además se debe destacar que en la literatura, incluido estudios de mi tesis doctoral sobre el tema, la tasa de fallo de la sutura meniscal puede ser hasta de un 20%, por lo que se debe ir evaluando al paciente con mucho mas detenimiento al hacer una sutura que en el caso de meniscectomía pues pueden requerir una segunda cirugía para “limpiar” esa sutura que no funcionó.

Igualmente se debe destacar que el menisco puede “romperse” en varios sitios, tenemos dos meniscos (interno que es el mas usualmente dañado, y externo) y además cada menisco tiene 3 partes: cuerno posterior (el mas habitualmente afectado), cuerpo y cuerno anterior, además de la raíz del menisco externo (donde nace) y la rampa del menisco interno (mediante la cual se engancha el menisco a la cápsula posterior de rodilla), el tipo de lesión igualmente determina el posible tratamiento de esa lesión meniscal.

La lesión meniscal de la que hablamos en este texto es habitualmente la traumática, es decir, la que se produce posterior a una caída, a un giro forzado de la rodilla o a una contusión fuerte sobre la misma. Existen lesiones meniscales degenerativas, es decir, que debido al desgaste de la rodilla (pérdida del cartílago y del espacio articular) se manifiestan como parte de dicho daño de la articulación, y no necesariamente es el causante del problema sino mas bien es una señal mas del desgaste de la rodilla.

Debido a lo anteriormente comentado, la lesión meniscal requiere una valoración por un médico traumatólogo experto, que mediante la anamnesis, la exploración física y las exploraciones complementarias (habitualmente radiografías y resonancia magnética) pueda determinar si realmente la lesión meniscal es la causa del dolor de rodilla, y si es así, determinar de forma individualizada el mejor tratamiento posible.